Amigos, si procede El mundo empresarial es muy peculiar, porque dos empresas rivales a muerte también pueden ser socias.
Es lo que está pasando con Microsoft y muchos de sus rivales respecto a la inteligencia artificial: todos quieren quedarse con el mercado, pero parece que se necesitan entre sí.
Por una u otra razón.
El digital The Information ha desvelado algunas empresas que estarían pagando al menos 1 millón de dólares al mes a Microsoft por servicios de IA y cloud.
Y es curioso que entre esos mejores clientes estén Meta (que desarrolla su propia IA) o TikTok, de la que se dice que estaría pagando más de 20 millones de dólares al mes a Microsoft para acceder a los modelos de IA que desarrolla la compañía junto a OpenAI.
Otra de las buenas pagadoras sería Adobe, que también tiene en marcha importantes proyectos de IA.
Veremos hacia dónde se dirige este mercado, tan competitivo y colaborativo a la vez.
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 Meta añadirá desde ya mismo nuevas opciones de uso a las Ray-Ban Meta en varios países europeos.
Aunque no la función que todos esperamos: esa que te permite usar las cámaras integradas en las gafas para rastrear el entorno y obtener respuestas e información.
La compañía se queja de que la excesiva e impredecible regulación de la Unión Europea no le da las suficientes garantías como para activar una función un tanto polémica por las implicaciones sobre la privacidad que puede tener. | | La otra Apple TV Pues sí, colega, podría estar gestándose una nueva Apple TV.
Pero no se trataría ni de una especie de descodificador ni de una plataforma de streaming...
...sino de un televisor.
Según Bloomberg, los de Cupertino estarían pensando en lanzar al mercado su propio televisor.
El proyecto no es nuevo en sí, ya que siempre se dijo que hace más de una década ya se le pasó por la cabeza a Steve Jobs.
El caso es que ahora podría tener sentido, ya que las Smart TV parece que se van a convertir en el epicentro del Smart Home, como ya te contamos en su momento.
Así que lanzar una tele conectada justo cuando se especula con que Apple podría lanzar una batería de dispositivos para el hogar que dejaría en nada al HomePod... puede tener sentido para matar dos pájaros de un tiro: convertir a esas teles de Apple en el hub desde el que controlar todo el hogar y, de paso, ponerse la alfombra roja en el mundo del entretenimiento, cada vez más vinculado a Internet (y a videojuegos, y a streaming, y a comunicaciones, y a apps...). | | Morir de éxito Eso le podría terminar pasando a Bluesky, la alternativa a Twitter en la que se están refugiando usuarios y empresas que han comenzado a abandonar la red social de Elon Musk por la, dicen, abusiva toxicidad que hay en ella.
Bluesky es, probablemente -y con permiso de Threads-, el mejor y más sincero clon de Twitter. Y eso le ha hecho ganar cerca de 3 millones de nuevos usuarios desde la victoria de Donald Trump en las elecciones, hace una semana.
Para que te hagas una idea, en los cerca de dos años que lleva activa Bluesky tan solo había acumulado unos 15 millones de usuarios.
Gran parte de ellos se sumaron en Brasil a raíz del bloqueo de Twitter en el país... por lo que parece que la jarana siempre beneficia a Bluesky.
El problema es que Bluesky pretendía ser una alternativa a X (ahora vamos a llamarla así porque de repente nos apetece) con pretensiones de abrirse paso a su ritmo, pero la explosión de nuevos usuarios está tambaleando sus propios cimientos.
Uno de ellos es básico: la moderación de contenidos.
Mientras que en todo 2023 solo recibieron 360.000 notificaciones (unas 1.000 por día), en la actualidad reciben 42.000 notificaciones cada día. Y no tienen recursos para atender a todas, así que hay dos opciones: o reforzar el equipo o ver cómo Bluesky se llena de basura.
En lo que se mantienen firmes es en su negativa a insertar publicidad o a usar los mensajes de los usuarios para entrenar a alguna IA.
Eso sí, en el futuro habrá planes de suscripción de pago.
¿Logrará Bluesky sobrevivir a X? | | Un éxito El combate de boxeo entre Mike Tyson y el youtuber Jake Paul, que emitió en la madrugada del viernes al sábado en exclusiva mundial Netflix, alcanzó una audiencia global de unos 60 millones de usuarios, según datos oficiales de la plataforma.
El pico de audiencia congregó a unos 65 millones de abonados, sobre una audiencia que supera los 270 millones de usuarios. O sea, que casi 1 de cada 4 suscriptores conectaron con el evento en directo. Teniendo en cuenta que en Europa era de madrugada, lo cual, sin duda, resta poder al asunto.
Aunque en términos absolutos podríamos decir que fue un éxito de audiencia que evidencia que el deporte en directo puede tener muy buen tirón en las plataformas de streaming, hay que recordar que Netflix recibió unas 100.000 quejas de usuarios descontentos con la estabilidad de la plataforma, escasa calidad de imagen y demás.
Parece que la clave del éxito no será tanto el acumulado de usuarios, sino poder retransmitir sin problemas técnicos estos eventos que precisamente por acumular a muchos millones de usuarios al mismo tiempo pueden ser un reto tecnológico. | | | | |
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